Escrito por Gabriel Vargas
“Descubre cómo la energía solar puede reducir tus facturas de electricidad y mantenerte fresco durante el verano”.
La energía solar es una forma limpia y renovable de obtener energía para tu hogar o negocio. Los paneles solares captan la luz del sol y la convierten en electricidad, incluso en días nublados.
Existen tres sistemas diferentes para utilizar energía limpia:
Sistemas interconectados: estos sistemas están conectados a la red eléctrica y utilizan tanto la energía generada por los paneles solares como la energía de la red. Esto significa que no es necesario que el sistema solar genere toda la electricidad que necesita el hogar. Si los paneles solares no están generando suficiente energía, el hogar puede utilizar energía de la red eléctrica. Esto asegura que siempre haya electricidad disponible, incluso en días nublados o en la noche.
Sistemas Hibrido o Mixto : Se caracteriza por utilizar sistemas interconectados y aislados al mismo tiempo . Por ejemplo, un sistema mixto puede estar conectado a la red eléctrica y utilizar tanto la energía solar como la energía de la red y tener baterías para almacenar energía solar. Esto permite utilizar la energía almacenada en momentos en que los paneles solares o la red no están generando energía, como en días nublados o en la noche.
Sistemas aislados: estos sistemas no están conectados a la red eléctrica y dependen únicamente de la energía generada por los paneles solares y almacenada en baterías. Esto significa que el sistema solar debe generar suficiente energía para satisfacer todas las demandas de electricidad del hogar. Los sistemas aislados son ideales para lugares remotos sin acceso a la red eléctrica o para quienes quieren ser independientes en su consumo de energía.
Al utilizar paneles solares, no solo estás ahorrando dinero en tu factura de electricidad, sino que también puedes ahorrar en gas. Si utilizas la energía solar para calentar tu hogar o agua reduciendo tu consumo de gas.
Los sistemas solares térmicos,
como los calentadores solares de agua, pueden ayudarte a subir la temperatura sin necesidad utilizar gas. Estos sistemas utilizan la energía del sol para calentar agua o aire en tu hogar. De esta manera, puedes ahorrar dinero en tu factura.
Además, al utilizar energía solar, estás ayudando al medio ambiente. La energía solar convierte la luz y calor del sol en electricidad o calefacción sin producir gases dañinos para el medio ambiente. Esto te ayuda a reducir tu huella de carbono y estarías ayudando a un futuro más sostenible.
